La oposición acusa al intendente, Fernando Gray, de echar mano a $6,6 millones del Presupuesto 2010 para cubrir la deuda que el municipio tiene con la empresa de recolección de residuos Covelia, atribuída al camionero. Pero fuentes de la municipalidad defendieron la gestión. “Se les paga siempre con dos meses de atraso porque sino, habría que pedir un crédito para financiarse y nos cobrarían 14% de interés”. El poder del camionero y la sombra de Duhalde.
Por Daniel Bilotta | 22.01.2010
El intendente de Esteban Echeverría, Fernando Gray, pagó la deuda que tenía el municipio con la compañía recolectora de residuos, Covelia, con plata del presupuesto 2010 y se levantó la polémica.
La oposición acusó a Gray de echar mano a 6,6 millones de pesos del actual presupuesto para cubrir el pago de servicios que la firma atribuída a Hugo Moyano le prestó al Municipio durante el último trimestre del año.
Esta medida fue avalada por el Concejo Deliberante momentos después de sancionar por mayoría el nuevo cálculo de recursos que prorrogó el estado de emergencia y con él, la facultad del intendente para reasignar partidas.
Fuentes del Concejo Deliberante que pidieron estricta reserva de identidad dieron por seguro que en abril se liberará un pago por un monto similar hasta cubrir los casi 13,7 millones de pesos que en la foja 38 del Presupuesto figuran afectados al ítem “servicios de deudas y disminución de otros pasivos” al que interpretan como una metáfora para camuflar el pago de los servicios del primer trimestre de este año a la misma empresa.
Desde el municipio explicaron a La Política Online que “es una estrategia para pagar menos”, ya que si pagaran al contado deberían buscar financiamiento en el mercado y seguramente “nos cobrarían una tasa de al menos el 14 por ciento”, aclararon las fuentes.
Si bien Gray enfatiza que este año logró terminar el período con déficit cero, el desequilibrio viene de arrastre y está vinculado con la caótica situación financiera en la que recibió el Municipio, que según afirma tenía una deuda de 46 millones. Gran parte de esta pesada herencia fue reducida y refinanciada –incluída la que mantenían con Covelia-.
“Se le paga siempre con dos meses de atraso. Para cancelar la deuda habría que pedir un crédito con 10% o 14% de interés”, contaron. De esta manera, argumentan, el costo de financiarse es cero.
Como sea, el déficit que Gray heredó de su antecesor, Alberto Groppi, sigue siendo tras la primera mitad de gestión, motivo de pullas entre partidarios de una y otra gestión.
Incluso algunos de los aliados del intendente en el Concejo Deliberante, que suman sus 10 votos a la decena que ostenta la bancada del Frente por la Victoria, creen ver asomarse la controvertida figura de Luis Obarrio, forzado en 1995 por el gobernador Eduardo Duhalde a declinar su reelección por un tercer mandato a raíz del fuerte déficit acumulado.
Desde el peronismo admiten que los 13 millones imputados al rubro “servicios de deuda” por el Presupuesto 2010 está destinado a financiar gastos que de otro modo no podría cubrir el gobierno municipal e inscriben la decisión dentro de un literal efecto cascada de la desregulación a endeudarse por el gobierno nacional a las provincias y, en el caso de la de Buenos Aires, desde la administración provincial a los Municipios.
Desde el peronismo disidente que no responde a Obarrio, vivieron la controversia como una revancha personal. “Esto demuestra que durante los dos años en que gestionó, Gray no achicó el déficit que nunca supo precisar de cuánto era”.
Pero en la Municipalidad alegan que la deuda de 46 millones con que carga la gestión es del intendente anterior y que, “en lo estricto”, se está en un “déficit cero”. “En la municipalidad se gasta exactamente el mismo monto que hay de ingresos, ni un peso más”.
Mayoría propia
El intendente Fernando Gray consolidó luego de su triunfo en las elecciones del 28 de junio una mayoría aplastante en el Concejo Deliberante local, en el que durante la primer mitad de su mandato estuvo en minoría.
Gracias a los concejales que sumó y su política de alianzas hoy Gray cuenta con un amplia mayoría en el deliberativo comunal. El bloque del Frente para la Victoria tiene 10 miembros, a los que se suman Roberto Vallejo y Roberto Devoto, electos por el Partido de la Victoria pero rápidamente encolumnados con Gray, los tres ediles de Unión Pro – Heber Van Thoren, Graciela Santos y Rodolfo de Souza – más Giselle Tarsia de Libres del Sur y Rodolfo Requejo de la Unidad Comunal, Daniel Requejo.
La oposición la conforman Marta Mangas y Pablo Losada por el vecinalismo y Patricia Gramajo de la Coalición Cívica. Desde allí se aprobó en general el cálculo de recursos y se objetó alguno de sus artículos en particular. El oficialismo y sus aliados votaron a libro cerrado.
Gray y Moyano, una relación difícil
No es un secreto que en los municipios del Conurbano el servicio de recolección de basura se come la parte del león del Presupuesto. Cuando asumió en el cargo, Fernando Gray libró una durísima batalla contra Covelia para bajar el costo del contrato, que forzó mediaciones de la Casa Rosada y Daniel Scioli.
El conflicto provocó que los camioneros de Moyano le sitiaran literalmente el Municipio durante semanas y hasta amenazas e intimidaciones más o menos graves. Incluso, los recolectores iniciaron una huelga por 12 días en enero del 2008, lo que dejó al distrito cubierto de basura. Y casi en simultáneo con otros supuestos siniestros de corte policial, el intendente denunció la quema de un camión municipal que intentó cubrir ese servicio.
El conflicto se originó por una deuda de 7,5 millones imputada a la anterior gestión y que Gray habría desconocido. El intendente deslizó que su antecesor deliberadamente le autorizó a Covelia un importante aumento antes de dejar el cargo, como una manera de desestabilizar a futuro las finanzas del municipio.
Como sea, cuando Moyano amenazó por radio 10 con marchar a la Plaza de Mayo sino se solucionaba el conflicto en Esteban Echeverría, una intervención directa del entonces jefe de Gabinete Alberto Fernández, que se comprometió a pagar una parte de la deuda a Covelia, permitió llegar a una frágil tregua. Tiempo después, el nuevo contrato –que ganó otra vez la empresa atribuída a Moyano-, se adjudicó bajo la supervisión de Poder Ciudadano.
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